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Hansi Flick ya sabe qué puede dar de sí cada jugador. Lo que no sabe es si está en condiciones de ofrecer el máximo de su capacidad física. Lo que espera ahora de cualquiera de todos ellos es la sinceridad suficiente para que le digan si se sienten cansados o tienen algún tipo de limitación que les impida jugar al cien por cien.
Empieza este sábado ante el Celta el tramo de los últimos diez partidos que deciden la temporada: siete jornadas de Liga, una final de Copa y dos partidos de la semifinal de la Champions, que derivarían en uno más, once, la final, si el Barça elimina al Inter de Milán. Acabará la campaña azulgrana con 60 o 61 partidos disputados.
Confianza mutua
Los medidores tecnológicos que usan los futbolistas arrojan decenas de datos sobre el trabajo en los entrenamientos y en los partidos, el desgaste físico sufrido e incluso el riesgo de lesión que se contrae. Pero los datos no revelan las sensaciones de los futbolistas. Flick espera de ellos que sean “honestos consigo mismos y con el equipo” para reconocer si están o no en perfectas condiciones cuando les pregunta antes de decidir la alineación.
El entrenador ha tendido puentes de comunicación por los que se ha alcanzado un nivel de confianza mutua con los futbolistas. “Da igual que vayas a jugar 45 minutos, 90 o 60, hay que dar el cien por cien, esa es la mentalidad que yo pido”, explicó, esperando la total integridad de sus pupilos. “La responsabilidad sobre su propio cuerpo es de ellos”, apuntó. Son ellos quienes caerán lesionados y se quedarán fuera de la fase más apasionante de la temporada.
Hansi Flick, durante el último entrenamiento en la ciudad deportiva. / Alberto Estévez / EFE
Koundé no para
No tiene quejas hasta ahora. Pero hay motivos para dudar de que el cansancio empiece a hacer mella en algunos futbolistas. No es el caso de Jules Koundé, según parece, aunque el defensa francés es quien acumula más minutos (más de 4.100) y es el único que ha participado en todos los encuentros (50).
“El problema con Jules es que si un día hacemos 30 minutos menos de entrenamiento, al día siguiente se va a correr a Sitges; para eso, mejor que corra en el campo para el equipo”, bromeó Flick, sobre el “estupendo estado de forma” del defensa francés, muy impreciso en Dortmund en una actuación que insinuó señales de agotamiento.
También Lamine Yamal. “Todo el mundo sabe que es un genio a los 17 años. Carga con mucha presión sobre sus espaldas y le necesitamos al mejor nivel”, comentó, insistiendo en que habla con los futbolistas antes de tomar decisiones. “Yo necesito que sean sinceros conmigo y Koundé me dice que está bien”, explicó Flick, que en la cita europea sentó a Pedri e Iñigo, el segundo y el quinto en minutaje acumulado.
“El problema con Jules es que si un día hacemos 30 minutos menos de entrenamiento, al día siguiente se va a correr a Sitges; para eso, mejor que corra en el campo para el equipo”
Jules Koundé y Dani Olmo, en la última sesión preparatoria. / Alberto Estevez / EFE
El partido de Dortmund pudo costar muy caro, aunque sólo se saldó con una derrota inofensiva que cerraba una racha de 24 partidos (20 victorias y 4 empates) sin perder. La racha particular de la Liga son 12 partidos (10 y 2). “Si al empezar la pretemporada alguien me hubiera dicho que el 18 de abril estaríamos en las semifinales de la Champions, jugaríamos la final de Copa y seríamos líderes de la Liga, lo habría firmado”, aseguró Flick que se olvidó de mencionar el primer título ya disputado y conquistado: la Supercopa de España.
Lamine Yamal, durante el entrenamiento de este viernes. / Alberto Estévez / EFE
Enfadado, pero sin excusas
La visita del Celta llega cuatro días después del de Dortmund. La doble cita con los alemanes, y el partido de Leganés, se produjo en una secuencia de tres días entre cada uno. Flick se enfadó porque se repetirá en la semifinal con el Inter y el Valladolid-Barça, fijado para las nueve de la noche. El duelo con el Celta ha de ofrecer la mejor versión del equipo. “Los jugadores ya saben lo que tienen que hacer”, aseguró, desdeñando la excusa del cansancio en caso de que se produzca un tropiezo. “Seguimos siendo positivos”, subrayó. En Balaídos, ganaba el Barça por 0-2 y encajó dos goles en dos minutos (en el 84 y el 86).
Flick reconoció en el Celta de Claudio Giráldez la misma virtud que destacó el entrernador gallego del Barça: “Tienen una idea muy clara de cómo quiere jugar”.
